lunes, 3 de agosto de 2009

y esa eres tú: perdida en la habitación con una hoja llena de palabras tachadas. sin saber por dónde empezar a sentir. te despiertas un día cualquiera y te das cuenta de que hay alguien en el mundo capaz de romper con una mirada todos tus esquemas. tú, que te creías hecha de ébano y resulta que una única voz puede convertirte en simple humo. en nada.
y no sabes cómo vas a acostumbrarte a llevar una máquina latente en el pecho que parece a punto de estallar, cómo vas a volver a pedirle que se queda a tu lado cinco minutos más.

6 comentarios:

Unknown dijo...

gairebe sempre soc el primer en comentar xD...

m'agrada molt lu de "acostumbrarte a llevar una máquina latente en el pecho que parece a punto de estallar"


veig q va mb el blog ;)

vagi b!

Anónimo dijo...

acostumbrarse, el tiempo lo hace y a veces el no tener opción.
una pequeña mirada, una palabra, un momento, lo cambia todo.
y el corazón, lo soporta todo, aunque se apague, se enfrie y tema, no sé como lo hace...

Charlie dijo...

bello escrito

pase a saludarte
un beso! q estes bien

Deep Loving Feelings dijo...

Me encanto tu texto!
Tu forma de escribir, es linda!
Gracias por compartir.

Un beso grande
Martín

Pluma de fuego dijo...

Ufff!!!haber, creo que no puedes pensar en por donde empezar a sentir, todo fluye y sucede sin que te des cuentas. Es increible como todo lo que somos, se evapora cuando encontramos a esa persona

Rubén Darío dijo...

No se le pide nada paisana, esa maquina se regenera y se acostumbra a todo, lamentablemente.
un beso y otro...
Darío.